Beijing está registrando uno de sus niveles más bajos en décadas en medio de una crisis en la cadena de suministro, una desaceleración de las exportaciones y una población cada vez menor.
China ha fijado su objetivo de crecimiento económico para 2024 en un 5 por ciento, una fuerte caída con respecto al crecimiento de dos dígitos que durante décadas ha sostenido a la segunda economía más grande del mundo.
La Asamblea Popular Nacional (APN) de China dio a conocer sus planes el martes mientras su economía de 18 billones de dólares enfrenta vientos en contra.
“Necesitamos comunicarnos con la gente de la manera correcta para establecer una política estable, transparente y predecible”, dijo el presidente chino Li Qiang en su primer informe sobre los objetivos del año.
Li dijo que Beijing seguirá adelante con “reformas de desarrollo”, incluidas reformas tributarias, impulso de la tecnología, fomento del consumo interno, eliminación de barreras a la inversión privada y provisión de 1 billón de yuanes (139 mil millones de dólares) en fondos gubernamentales privados.
“No debemos olvidar el peor de los casos y debemos prepararnos bien para todos los riesgos y desafíos”, afirmó Li.
El objetivo del 5 por ciento, que está en línea con el objetivo del año pasado, se produce en un momento en que la economía de China se enfrenta a una serie de desafíos, incluida una crisis en la cadena de suministro, una desaceleración económica, tensiones comerciales con Estados Unidos, una población cada vez menor, una elevada deuda y desempleo. .para empleos para jóvenes.
La economía de China creció oficialmente un 5,2 por ciento en 2023, el mejor desempeño en décadas, incluidas las consecuencias de la pandemia de COVID-19.
“Los objetivos de crecimiento de ‘alrededor del 5%’ muestran que China ha dejado de perseguir una tasa estable y otras prioridades, como la competencia tecnológica con Estados Unidos y la defensa”, dijo a Al Jazeera Gary Ng, economista de Natixis en Hong Kong. .
“Es difícil esperar algún tipo de estímulo bazuca porque el gobierno sólo busca estabilidad económica, lo que significa que el crecimiento se desacelerará”.
En su discurso, Li reconoció los “múltiples problemas” que enfrenta la economía, incluidas presiones externas y “problemas graves y profundos”.
Los inversores siguen de cerca la reunión anual en busca de anuncios que impulsen la confianza económica.
Los inversores globales han estado saliendo de China a un ritmo récord: 68.700 millones de dólares en capital empresarial y familiar salieron del país el año pasado.
Los analistas han reducido las expectativas de importantes medidas de estímulo económico debido a la aversión de Beijing a gastar más.
Los comentarios de Li del martes se produjeron después de que funcionarios anunciaran que el primer ministro no celebrará una conferencia de prensa al final de la sesión anual del parlamento, por primera vez desde 1993.
La medida ha sido vista como otro ejemplo más de los esfuerzos del presidente chino Xi Jinping por concentrar el poder en manos del gobernante Partido Comunista.