Ningún presidente controla la economía, pero tiene que hacer algo al respecto. En esta elección, los votantes estadounidenses elegirán entre presidentes que impulsaron medidas enérgicas para ayudar al país a recuperarse de la pandemia en 2020. Y todos tienen algo de qué presumir. ¿Quién lo hizo mejor?
Depende de dónde miren los votantes y de cuánto les importe evaluar a sus candidatos.
En el trabajo, el presidente Joe Biden es el ganador. La economía empezó a funcionar más rápido que cualquier otro presidente en tres décadas. Pero en cuanto al crecimiento salarial y la inflación, el expresidente Donald Trump tiene ventaja sobre su potencial rival en noviembre.
Por qué escribimos esto
A los ojos de sus seguidores, Donald Trump y Joe Biden tienen mucho de qué presumir en lo que respecta a la economía. Nuestros gráficos proporcionan una visión general de sus competidores.
Por supuesto, el tiempo y la materia son importantes al comparar las finanzas. Se puede decir que ambos presidentes tuvieron suerte porque heredaron una economía que comenzó a decaer nuevamente: la Gran Depresión en el caso del Sr. Trump y la caída de la epidemia en 2020 para Biden. Ambos impulsaron paquetes de estímulo masivos para combatir la recesión, paquetes que paralizaron la economía incluso cuando pagaban la deuda federal.
Aunque todo el mundo puede presentar las principales políticas económicas durante su carrera, es justo decir que otras autoridades (la Reserva Federal, la OPEP, las empresas y los consumidores, por ejemplo) también tuvieron mucho que decir sobre la dirección y la velocidad del crecimiento.
El impacto a largo plazo de estas políticas presidenciales aún está por verse.
Muchos economistas aplauden los recortes de impuestos de Trump, incluso cuando los críticos los critican como dádivas a los ricos en un momento de crecientes tasas de interés sobre la deuda nacional.
Muchos ambientalistas ven la energía verde de Biden como un paso importante para controlar las emisiones de gases de efecto invernadero del país.
Sin embargo, la mayoría de los economistas coinciden en que el fuerte aumento de la deuda federal bajo ambos presidentes perjudicará a la economía en el largo plazo. Y sus restricciones al comercio con competidores como China y Rusia, si bien son importantes por razones políticas, podrían limitar el crecimiento futuro.
Las encuestas, incluida una encuesta reciente de NBC News, muestran que los votantes actualmente confían más en Trump que en Biden en cuestiones económicas. Al mismo tiempo, la baja inflación ha ayudado a que la confianza del consumidor se recupere significativamente en los últimos meses.